No estoy de acuerdo en que se llame sitios de comida rápida al Telepizza y a los Burguer ni a ningún establecimiento de estos que se le parezca.
¿Alguien ha conseguido que le traigan una pizza antes de tres cuartos de hora desde que la pides?. Nadie, cuando te la traen mas que comida es cena.
¡El secreto está en la masa!, ¡Nos ha jodio!, aquí no mienten eh, el secreto de la fortuna del dueño, porque lo único que comes es eso, masa. Pan redondo y calentito untao de tomate y poco mas. Los ingredientes los puede contabilizar un niño de dos años. Yo viendo que en una familiar me entraron seis cachitos de bacon y dos aceitunas me dije. ¡La próxima no me pasa!, y la pedí con doble de queso y doble de todo. Me pusieron un trozo de bacon mas a cada lado y otro en el centro y me dieron un quesito El Caserio para que lo distribuyese yo donde me pareciera. Y hala, tan anchos se quedaron, eso si, me regalaron un balón hinchable de Coca-Cola que fue lo único que se hinchó.
En los Burguer la dificultad empieza a la hora de pedir el menú. Intentas memorizar el nombre mientras esperas en la fila a que te toque, lo repites una y otra vez como si te fueses a sacar la selectividad y cuando te toca...
-Hola, deme un...(miras de reojo el cartelón para repasar sin que te pillen). Un chiken quichen burguer friskis whoper fish.
-Eso no existe, será un Whoper chiken doble cheesse burguer.
-Si, será eso - contestas con una vergüenza, con una cara de esperar un cero pelao.
El cero viene acompañado delante con un dos, veinte euros entre la bebida las patatas y la crema esa que de mayor quería ser helado.
-¿Lo quiere con doble de beicon, con doble de queso, con o sin pepinillo, con o sin tomate, extra de mayonesa o sin kepchup, el pan con sésamo o sin el?
Para no evidenciarse uno mas decides cortar por lo sano.
-Con todo, póngamelo usted todo.
Cuando te lo dan te quedas mirando y esperando el andamio que sujete aquello que parece una torre de los Legos en vez de algo comestible.
Lo llevas hasta la mesa haciendo equilibrios mientras te preguntas que ser humano que no sea Massiel puede hincarle el diente a la torre de Pisa cárnica.
-A lo mejor si lo aplasto un poquito...
Esto es lo peor que se puede hacer, yo lo hice y el pepinillo y el beicon fueron como un misil a parar a la boca del señor de enfrente que iba a decir algo a su señora antes de que mis ingredientes le atacaran directo al esófago. Por el otro lado un chorrillo de kepchup cogió postura en los pantalones de dos bobas que iban de aquí para allá con la bandeja buscando donde acoplarse. Pude oírlas mientras me escondía simulando atarme el zapato.
-Tía, tía, te espero aquí, vete al baño que te ha venido la regla y tienes un manchurrón...
-No jodas tía...Si no me toca...
Temeroso de propiciar algún otro caos me fui a la caja y le dije a la señorita.
-¿Me lo puede pasar por la Tourmix y hacerme un puré?
-No, pero si prefiere usted la Burguer onions beicon tender con...
-No, no dejelo usted, se me ha quitado el apetito.
Decidido a ser moderno me dí una vuelta por ahí y me encontré a un grupo de chicos que se amontonaban delante de un local que anunciaba Doner Kebap.
Yo no sabia lo que era esto y la curiosidad me llevó los pies hasta allí. En cuanto se despejó un poco el gentío y vi a un menda sacando virutas con una miniradial a una masa inmensa de carne en un solo bloque que giraba lentamente alrededor del fuego, entré en estado de shock.
No conozco ningún animal que tenga en su anatomía dicha mole de chicha, vamos ni un toro de Mihura. Me recordaba aquella carnuza a algo y después de divagar unos instantes me horrorice aún mas. Los muslos de mi tía Edelmira la de Torrecilla del Jaral.
Me busqué el movil en el pantalón y marqué el número con desesperación.
-Si, hola tia Edelmira, soy Paquito el de la Choni, ¿Como está usted tía?,¿Que tal se encuentra?- pregunté angustiado
-Pues ahi vamos hijo, ¡Si no fuese por lo de las piernas!.
-¿Que le ha pasado a usted en la piernas tía, digame que aún las tiene?
.Si hijo, Bien jodidas que las tengo...
Respiré un poco después de colgar con la foca de mi tía pero ni entonces ni ahora soy capaz de probar uno de esos sin sentir que me he vuelto antropófago, es que... Hasta me jode que se los coma nadie, vale es una vieja obesa pero es mi tía coño.
Para terminar no puedo olvidarme de otros especialistas en comida rápida, los chinos, yo es que los orientales me fascinan, que tíos, estos igual valen pa un roto que pa un descosido.
Los chinos en sus restaurantes tienen una carta de cuarenta platos, y les pidas el que les pidas siempre tienen, no se como lo hacen pero no se les agota nada que venga en la carta.
Decidido a investigar, quedé con veinte colegas y les propuse ir a un chino y pedir todos lo mismo. Ternera con bambú y setas, veinte raciones.
Y... nos las pusieron, vaya que nos las pusieron, son invencibles, eso si cuando salimos y nos disponíamos a coger al perro atado en la calle a una farola nos encontramos solo el arnés y un cartel que decía. PELO LLEVADO GLUA POL MAL ESTACIONAMIENTO.
Sospechoso ¿No?.
